Una persona en su vida diaria emplea una buena cantidad de tiempo en actividades improductivas desde el punto de vista laboral. Entre ellas los oficios del hogar, desplazamientos, compras de víveres, etc. En el caso de los estudiantes todas estas obligaciones impactan negativamente su dedicación a la carrera, no obstante, si vives en una residencia universitaria en Barcelona nada de eso será requerido.
Los jóvenes que salen del hogar paterno para ir a la universidad en una ciudad lejana optan por varias opciones de alojamiento. En ocasiones alquilan un piso y viven por su cuenta o con otros estudiantes y eso les impone una seria de responsabilidades y compromisos que nunca habían enfrentado antes porque mamá y papá se ocupaban de todos.
Eso significa que ahora son responsables de comprar los alimentos y prepararlos, limpiar el lugar, lavar la ropa y muchas cosas más. Si viven solos, entonces asimismo enfrentan la nostalgia de estar lejos de casa, separados de sus amigos y del ambiente al que están acostumbrados.
La mejor solución es, en todos los casos, alojarse en una residencia estudiantil que ofrezca servicios completos. Ejemplos de ellos serían, las tres comidas diarias, limpieza de las habitaciones, cuidado de la ropa y que además se encuentre cerca del centro educativo para no perder tiempo durante los traslados.
Por otro lado, el ambiente debe ser calmado e invitar a la concentración y también promover el desarrollo de buenas amistades que contribuyan para que la persona se sienta cómoda y feliz. Salas de estudio con servicios básicos de reproducción y acceso a Internet los ayudarán a obtener buenos resultados en sus evaluaciones.
Beneficios adicionales podrían incluir canchas deportivas o gimnasio, aparcamiento para el vehículo y por supuesto, la localización en una zona segura de la ciudad. Con todo el tiempo que ahorrarás en una residencia con estas características podrás hacer turismo en la bella y moderna metrópolis de Barcelona, desarrollar nuevas amistades y estudiar con total libertad y comodidad.